JESUS EL CRISTO

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Gnosis por Samael Aun Weor

domingo, 20 de febrero de 2011

SOBRE LA RECEPCION DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS

RECEPCION DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS



LAS EMOCIONES NEGATIVAS.

NOTA SOBRE LA RECEPCION DE LAS EMOCIONES NEGATIVAS

Cuando se reciben impresiones negativas acrecientan la Segunda Fuerza en nosotros.

Basta decir simplemente que todo se vuelve más difícil.

Las gentes crean a menudo dificultades a todo —de hecho, este crear dificultades suele pertenecer al Rasgo Principal.

Cada persona tiene un Rasgo Principal, sobre lo cual todo descansa.

Se lo compara a un eje central a cuyo alrededor todo gira en el hombre o la mujer.

Cuando una persona intenta olvidarse de sí misma y solo recuerda su propósito, el Rasgo Principal se interpone.

En cada decisión, el Rasgo Principal decide.

En suma, en lo que respecta a la transformacion de si, en mudar el propio Ser, constituye la Fuerza más poderosa en nosotros.

Cada manifestación es el punto de encuentro de tres fuerzas, la Primera, la Segunda y la Tercera Fuerza.

La Primera Fuerza es llamada activa y la Segunda Fuerza es una fuerza de resistencia a la fuerza activa, o fuerza oponente.

La Segunda Fuerza está en todas las cosas, hasta en la imaginación y fantasía donde al menos suponemos hacer lo que nos da la gana.

Si no fuera por esa fuerza de resistencia, todo estaría sin restricción alguna, sin freno, sin la necesidad de esfuerzo, sin forma —pero decirlo es absurdo, porque en todo lo que existe, en todo lo que se manifiesta, esta la Segunda Fuerza—.

Ahora bien, cuando un hombre se hace el propósito de transformarse, su Rasgo Principal se yergue como Segunda Fuerza y le opone resistencia.

Pero las gentes no se dan cuenta que tienen en ellas mismas la Segunda Fuerza.

La ven siempre como si estuviera fuera.

Retornemos a la observación con que hemos iniciado este comentario.

Dije que la recepción de impresiones negativas acrecienta la Segunda Fuerza.

Intentemos ver por qué ocurre así y como de resultas de ello una persona se demora en el Trabajo sin darse cuenta de lo que la impulsa a hacerlo.

Quiero decir que una persona en el Trabajo, cuyo objeto es acrecentar la conciencia y así mudar el Ser, no puede progresar más allá de cierto punto a no ser que detenga las impresiones negativas de los otros.

En primer lugar, al recibir y aceptar las impresiones negativas de los otros, de la vida, de todo, se alimenta la parte negativa del Centro Emocional.

Esa parte del Centro Emocional tiene que sufrir hambre, porque se asemeja a una enfermedad en dicho Centro.

El Centro Emocional, si un hombre o una mujer trabaja contra esa parte adquirida, puede transmitir significación desde el Centro Emocional Superior.

Se puede llamarlo inspiración, significación, valer la pena, algo diferente de la vida, alguna fuente interior de vida y de ser feliz —una débil palabra— y empero muy cierta.

Puesto que todos nacemos en medio de gentes dormidas —puesto que Papá y Mamá y todo el resto estaban dormidos, quedamos infectados por las emociones negativas—.

Inhalamos la atmosfera de aquellos que nos rodean desde el nacimiento —y las gentes son negativas y gobernadas por las emociones negativas—.

Así en nuestra Personalidad adquirida hemos formado un centro espurio llamado la parte negativa del Centro Emocional.

Cuando nacemos el Centro Emocional carece de parte negativa.

Así adquirimos emociones negativas.

Y debemos agradecerlo, porque si las emociones negativas nacieran en el Centro Emocional esencial, nunca podríamos separarnos de ellas.

Esta es la enseñanza y no cuesta nada ver lo que significa si nos tomamos el trabajo de reflexionar.

La validez de ser negativo no es esencial. Es cuestión de la Personalidad adquirida y por eso es una enfermedad.

Así se ve al cabo de muchos años que significa el tener derecho a no ser negativo.

Esta es una introspección maravillosa —un verdadero despertar— el inicio de la transformacion del Ser.

Ahora bien, cuando recibimos y aceptamos emociones negativas de otra persona, se acrecienta la fuerza de la parte negativa del Centro Emocional que se ejerce sobre nosotros.

Pero no es solo esto lo que ocurre. Repercute sobre nosotros —a saber, la representación de dicha persona en nosotros se vuelve negativa—.

Cada persona que conocemos existe en nosotros como representación así como es exterior a nosotros como objeto de los sentidos.

El mundo externo es reflejado en nosotros a través de los sentidos por vía del sistema nervioso, los nervios y sus impulsos y representado en nosotros como gentes, cosas.

Si recibe una impresión negativa de una persona a quien conoce bien, dicha persona en usted llega a ser negativa para usted.

Por ejemplo, usted dice que ama a X. Luego ve a X y piensa que estúpido es.

Entonces X en usted se vuelve negativo.

Quizá tenga una pesadilla en la que interviene X —en la que lo aborrece y desea asesinarlo—

¿Por qué?

Porque usted ha asesinado a X en sí mismo.

Así la recepción de las impresiones negativas de los otros acrecienta la Segunda Fuerza en usted.

Acrecienta los enemigos en usted.

Puede llegar a ser un obstáculo de la mayor gravedad en el Trabajo el recibir impresiones negativas de los otros.

Ahora bien, si ha dejado libre un portal, un vestíbulo, un espacio en sí mismo por medio de la observación de sí y ve la llegada de una impresión negativa y tiene la capacidad de impedirle el paso, si no se identifica con ella, ni la deja ir adonde desea, ni le dice "Yo" a ella, entonces se mantiene apartado del resultado mecánico de dicha impresión.

Esto es magia.

Es el lugar que todos debemos dejar libre en nuestro mundo interior. 

Es lo mismo que abrir una puerta física al mundo externo y encontrar allí a un hombre malvado y dejarlo entrar —o cerrar la puerta y echar el cerrojo—.

Ocurre lo mismo en el mundo interno.

Pero si no hemos dejado ese espacio libre, ese portal, ni construido puertas y cerraduras, estamos a merced de la vida exterior, por no tener cosa alguna en nosotros que impida su continuo efecto.

Pero cuando se da uno cuenta que la vida exterior y las gentes y las cosas solo vienen en la forma de impresiones, por la vía de los sentidos, entonces si se ha preparado ese espacio interior o claro, se las deja entrar y se aceptan algunas de las impresiones y se rechazan otras.

Esto es recibir las impresiones conscientemente.

Esto es llamado el Primer Choque Consciente — cuando un hombre, una mujer, empieza a ser un hombre, a ser una mujer, por primera vez— sea lo que fueren mecánicamente en la vida.

Así se comienza a ser Hombre Consciente. Ahora bien, si se recibe y aceptan las inacabables, celosas, envidiosas, desdichadas, impresiones negativas de los eventos de la vida cotidiana y de las otras gentes, se es tan solo una persona mecánica —aunque siendo general o primer ministro—.

Se está en función de la vida, regido por la vida.

No se tiene nada de consciente.

Por eso el Trabajo dice que se carece de psicología.

"¿Cómo puede tener una maquina psicológica?", dijo Gurdjeff: "Las maquinas son maquinas, algunas buenas, algunas malas.

Un hombre debe empezar por despertar antes que se le pueda hablar de psicología.

Como es mecánico, sea cual fuere el lugar que ocupa en la vida, no se puede hablar.

La psicología se refiere a las personas verdaderas.

Las gentes ordinarias, las gentes en la vida, que fueron hechas por la vida, sea quienes fueren, son máquinas.

¿Qué psicología, subrayo la palabra, puede haber en relación con las máquinas?

Para el estudio de las maquinas es necesaria la mecánica, no la psicología.

Es por eso por lo cual empezamos con la mecánica.

El camino que lleva a la psicología es muy largo.

Empezamos por el estudio de la máquina —del hombre-máquina, del hombre que se hace la ilusión de no ser una maquina".

Dr. Maurice Nicoll
Enseñanzas del Cuarto Camino

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